Los pacientes del Centro de Tratamiento para Drogodependientes de Móstoles han celebrado el carnaval con un taller de máscaras, que es mucho más que un taller de trabajos manuales, ya que sirve para “trabajar habilidades sociales, resistencia a la frustración, habilidades de coordinación visomotoras… que muchos han perdido tras años de adicción y marginalidad”, explica una psicóloga de Punto Omega, quien añade: “también ayuda a trabajar déficits cognitivos”.
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El educador y las alumnas en prácticas.
Este ha sido el primer año de taller de máscaras, pero seguro que no el último, porque “ha sido un éxito de participación”, según palabras de Antonio, el educador que ha organizado la actividad junto a dos alumnas en prácticas, María, de Integración Social, y Esther, de Animación Sociocultural.
El taller se prolongó durante varias mañanas de febrero y se cerró con la entrega de diplomas. “¡Nunca pensé que les iba a hacer tanta ilusión!”, comentó María.
Ambas alumnas presentarán este trabajo en el Centro de Tratamiento para Drogodependientes como proyecto final de su respectivo ciclo formativo. "Esperamos un sobresaliente", dice Esther muerta de risa.
El CTD de Móstoles es un programa de la Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid (Concejalía de Sanidad), gestionado por la Asociación Punto Omega.
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